Ruta por Bonansa, Cirés y Gabarret
Ruta con inicio y final en Bonansa, pasando por los pueblos de Cires y Gabarret, este último abandonado y arruinado.
19-jul-2020 — Distancia: 15 km — Desnivel acumulado: 351 m
Un recorrido por las estribaciones más septentrionales de la sierra de Sis, en el espacio entre los ríos Isábena, Baliera y Noguera Ribagorza, y más concretamente entre los barrancos de La Mola, del Mollás y de Cirés.
Bonansa, un pueblo situado estratégicamente, donde se cruzaban antiguos caminos que unían los territorios altos de Ribagorza con las tierras bajas, así como las cuencas de los ríos Noguera Ribagorzana con las del valle del Ésera, antesala de los espectaculares valles de Castanesa y Barrabés. Lugares de interesantes vestigios de un pasado que fue más activo y resplandeciente.
Nos hallamos en lo que es el territorio limítrofe entre la Zona Axial y de las Nogueras, una estructura en forma de pasillo entre lo que es el Puerto de Sahún y Montanuy, con abundantes afloraciones de calizas devónicas (de hace unos 400 mills/años), inconfundibles por su color rojizo y que están muy afectadas por la esquistosidad.
Por sus alrededores hemos hecho buenas excursiones, algunas de las cuales han tenido su entrada en este Blog, aunque no todas. Ver:
- Ruta por Bonansa, Castarné y Bibiles
- Ruta circular en Bonansa por la ruta de las ermitas
- Ruta por el municipio de Montanuy
- Ruta circular del Tozal de Puntons en Laspaúles
- Ruta por el Valle de Castanesa
Coincidiendo con la celebración del solsticio de verano, se celebra el ritual de <<Las Fallas>>, que, en 2015, fue declarado por la Unesco como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Un río de fuego, de grandes antorchas, desciende desde la cercana ermita de San Aventín hasta el pueblo de Bonansa. Todo un ritual purificador del fuego. Una tradición que se adentra en la noche de los tiempos, pues en muchas poblaciones del Pirineo y pre-Pirineo se celebraba, aunque ahora solo se recuerda en unas pocas.
Tomamos el GR-15 que une a Bonansa con Cirés y Pont de Suert. Un sendero trazado sobre lo que fue un más que centenario camino entre dichas poblaciones y que discurre bajo un espeso bosque.
Al poco de salir, descendemos hasta el barranco de la Mola, donde se halla un un bien conservado molino, cuyos orígenes se remontan a la época medieval. Sobre el dintel de la puerta existe la fecha de 1827, en que fue reconstruido. El molino se llama: La Mola de Navarri y que, precisamente, da nombre al barranco: <la Mola>.
El viejo camino se adentra en la espesura. Zonas de sombra bajo una exuberante vegetación a veces caduca y otras perenne, donde se suceden los juegos de luces y sombras. Unos bosques que cambian de color cuando llega el otoño. ¡Vale la pena el paseo!
Paredes de piedra flanquean un camino que, al arribar a unas extensas praderas (Prat de Campo), nos permite disfrutar de las excelentes vistas de los no muy lejanos montes de Castanesa. Se suceden los paisajes de singular belleza. En el <<Prat de Campo>> existe una zona de ‘Els Mollás’, humedales con abundante agua y que dan nombre al barranco de igual nombre y que nos llevará hasta Cirés.
Llegamos al pueblo de Cirés, siguiendo las marcas por el barranco de Mollás, que a partir de aquí, hasta su encuentro con el río Noguera Ribagorzana en Pont de Suert, adopta el nombre de <<barranco de Cirés>>. Es una población muy recuperada, con edificios en buen estado, muchos de ellos dedicados a turismo rural. Destaca la iglesia de San Cristóbal, del siglo XII, que no hace muchos años fue restaurada. Ya se divisa la localidad de Pont de Suert, en la provincia de Lérida.
Abandonamos el GR-15 para dirigirnos al abandonado y arruinado pueblo de Gabarret. Su iglesia románica —San Pedro—, del siglo XI, se halla en ruina total.
Las vistas paisajísticas son espectaculares, ante nosotros la sierra de Sis, el Tozal de La Mola —donde se ubica la ermita de la Virgen de la Mola— y las elevaciones de la vecina provincia de Lérida.
Una pista rodada nos conducirá de nuevo a las praderas del Prat de Campo, donde retomaremos el GR-15 que nos llevará de nuevo a Bonansa.
Un paseo bonito y muy recomendable, nada caluroso en época de calor.