Ruta circular por Radiquero
Ruta circular por el municipio de Alquézar, con inicio y final en Radiquero, pasando por la ermita de la Virgen de la Viña y San Pelegrín.
16-ene-2021 — Distancia: 17’56 km — Desnivel acumulado: 477 m.
Un recorrido por lo que es el Parque Cultural del Río Vero en lo que son las estribaciones de la Sierra de Sevil, limitando con los confines del Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara, que tiene unas excelentes vistas sobre los Somontanos de Barbastro y de Huesca, y de las nevadas cumbres de Guara. Un territorio que es surcado por la Cabañera que va de Mequinenza a Broto.
El primer tramo de la caminata, entre Radiquero y la ermita de la Virgen de la Viña, lo hemos hecho siguiendo las marcas de la 2ª etapa del Camino Natural del Somontano.
Una vez visitada la ermita, dejamos el Camino Natural del Somontano y una pista en ascenso nos lleva hasta la Cabañera que sube al refugio de Sevil, y que, en algunos tramos, todavía seguía cubierta de la nieve caída la semana anterior.
Radiquero
Población visitada en varias ocasiones, por la que hemos desarrollado algunas rutas. Ver:
Su pequeño casco urbano, se agrupa en torno a la calle que baja desde su iglesia parroquial (Ntra. Sra. de Bastarillas —siglo XVI/XVII—). Célebre es su Noche de Ánimas en la víspera del día de Todos los Santos.
Estamos en la parte noroccidental del Somontano de Barbastro, en lo que es el interfluvio de los ríos Vero e Isuala-Balcez. Un terreno donde abunda la caliza, con estrechos bancales deslizándose por las laderas de la sierra, que permitieran el cultivo agrícola.
Un territorio habitado desde tiempos remotos —por el entorno hay abrigos con pinturas rupestres—, que, en tiempos de los árabes, fue una excelente frontera defensiva natural al aprovecharse de su agreste orografía, de abundantes y profundos barrancos.
Lugar de tradiciones, de cuentos, leyendas e historias de todo tipo, como la de ‘Las abuelas de Sevil’, por ejemplo. Donde en remotas épocas de pocos medios y gran vinculación con la naturaleza, la brujería era la explicación a todos los males que afectaban a la comunidad —si los animales morían, granizaba, hacía mucho viento o no quedaban embarazadas las mujeres, toda explicación posible pasaba por el hecho de que alguna vieja del lugar les había amolao—.
Ermita de la Virgen de la Viña (municipio de Adahuesca)
De construcción popular. Un santuario entre barrancos con amplia visibilidad sobre las llanuras de los somontanos y sierras de alrededor. Aquí hubo ermitaños, que se encargaban de su cuidado y daban cobijo a pastores y viajeros, además de ir por los pueblos cercanos a recolectar limosnas y otras donaciones de las gentes.
Lugar de peregrinación, que se aprovechaba para reuniones sociales y para concertar algún tipo de transacción (¿cuántos acuerdos, arreglos matrimoniales y otras componendas se habrán realizado aquí?). Aquí se venía a dar las gracias por haberles salvado de las pestes, sequías, guerras y otras plagas; haciendo rogativas de lluvias y otras protecciones.
Oscuros y retorcidos relieves, con sus barrancos, estrechos, cuevas y monte más o menos cerrado; lugar de ‘fadas’, duendes, bruixas y apariciones del Diablo.
San Pelegrín
Pequeña aldea en las estribaciones de la Sierra de Sevil, en la que destaca una bien conservada iglesia, con advocación a la Natividad de la Virgen (siglo XVIII).
Este poblado, a buen seguro, se levantó al amparo de la Cabañera que por aquí pasa. Un lugar intermedio entre el pueblo de Radiquero y el refugio de Sevil. Cuando transitas por la vía pecuaria, observas todavía quedan restos de corrales donde se recogía el ganado y se resguardan los pastores, unos caminos que datan de cientos de años y que sirvieron de penetración y difusión de culturas, así como de intercambios comerciales. Interesante la historia que aportan estos caminos de la trashumancia.