Unos apuntes sobre la Inquisición

 

El hecho de hacer una referencia a La Inquisición en este Blog, y aunque, aparentemente, pueda no parecer mantenga algún tipo de relación con lo que es la base fundamental del mismo, se debe más bien a la intensa conexión y actividad que dicha institución llegó a mantener en los territorios del antiguo Reino de Aragón, aparte de que, el primer Inquisidor General de la Inquisición Española, Tomás de Torquemada, que lo fue entre los años 1483-1498, visitó el pueblo de Graus; y, además, en la provincia de Huesca también nacieron otros dos Inquisidores Generales, uno fue Manuel Abad y Lasierra, que ostentó el cargo entre los años 1793-1794, nacido en Estadilla, y el otro personaje fue Jerónimo Castillón y Salas, natural de Lascellas, y que desempeño el cargo de Inquisidor General entre los años 1815-1820.

Los orígenes de la vieja Inquisición medieval se remontan a finales del siglo XII o principios del XIII, cuando fue erigida por los pontífices para hacer frente a la herejía albigense, y fue también durante el transcurso del siglo XIII cuando se llegó a implantar en los territorios de la Corona de Aragón. Hasta finales del siglo XV, no llegó a hacerse extensiva a toda Castilla por mediación de los Reyes Católicos.

Hubo unos tiempos en los que llegaron a coexistir, mal que bien, tres religiones en lo que era la España  medieval (la judía, la musulmana y la cristiana), con dos civilizaciones dominantes, primero lo fueron los árabes y más tarde los cristianos, siendo estos últimos los que, a partir del siglo XII, comienzan a imponerse definitivamente. Las posiciones fanáticas de la iglesia y del poder de la época, llevaron a unas situaciones de intransigencia y de persecución contra todo aquello que no estuviera de acuerdo a sus ideales políticos o creencias religiosas; en España fueron los  judíos y los moriscos, así como  todas aquellas expresiones de tipo religioso que adoptaron las reformas de Calvino y Lutero, quienes sufrieron principalmente  las mayores extorsiones, llegando incluso a ser ejecutados, expulsados o desprovistos de todos sus bienes.

La implantación de la Inquisición por todo el territorio resultante de la unión dinástica de Aragón y Castilla, fue más bien un programa de carácter político que, aprovechándose  de la exaltación religiosa, acabó con la pluralidad de creencias,  la cual no resultaba compatible con el programa político que los Reyes Católicos tenían previsto. La Inquisición resultó ser un instrumento de estrategia religiosa que fue creada por razones de estado.

A pesar de lo proclamado en los discursos oficiales y por mucho que insistieran en ello, no fue la herejía lo que más preocupaba a los poderes de la época, lo realmente necesario era la organización y desarrollo de un proyecto político con la suficiente enjundia de doctrina cristiana, donde la herejía representaba una calculada disfunción.

El poder monárquico de la época, de acuerdo con su modelo político, no querían una Inquisición tradicional que funcionase al modo de los viejos usos papales, el objetivo era conseguir una institución que, sin abandonar su naturaleza primaria, organizara unas estructuras político-administrativas al servicio de los reyes. El deseo final era llevar la iniciativa en la  designación de los Inquisidores Generales y de todos los demás jueces e inquisidores de los que dependían; se designaba o recomendaba la persona del  Inquisidor General al Papa, puesto que los reyes no tenían facultad para su nombramiento, y por ello deseaban obtener una legitimidad eclesial que estuviera sujeta a su regia jurisdicción.

Describir lo que se consideraba como percepción de “la herejía”, la situación de los llamados “conversos”,  lo que se consideró como “las limpiezas de sangre”, la realización de “los autos de fe”, la importancia que llegó a tener “el secretismo”, la persecución de “la brujería”, la composición de “los Consejos de la Inquisición”, el nombramiento de “los inquisidores”, la proclamación de “los veredictos”, la materialización de “las torturas”, etc.,  son temas que se irán desgranando poco a poco para poder llegar a entender lo que fue y representó esta institución en el transcurso del período de tiempo que se mantuvo vigente, lo cual fue durante varios siglos y que fue abolida bien entrado el siglo XIX.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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