Ruta por El Entremón
Recorrido efectuado el 7/08/14, entre el pueblo nuevo de Mediano y el reconstruido y muy bien conservado pueblo de Ligüerre de Cinca, pasando por la presa del embalse de Mediano y por el congosto del Entremón.
El embalse de Mediano que está en el río Cinca, se construyó entre las décadas de los años 40 y 50 del pasado siglo, aunque, posteriormente, en los años 70 fue recrecida su presa. Tiene una capacidad de 436’36 Hm3, y su principal utilidad es la producción eléctrica además de servir como regulador del embalse de El Grado, cuya cola de pantano llega a unos muy pocos kilómetros, justo al final del congosto del Entremón.
La construcción del embalse, contribuyó a que desaparecieran bajo sus aguas o fueran abandonados varios pueblos, algunos de ellos, aunque no fueron anegados también se vieron forzados a su abandono. El propio pueblo de Mediano, que da nombre al embalse, desapareció bajo las aguas, aunque todavía queda en pie la torre de la iglesia, que se ha convertido en todo un icono del pantano y sirve, además, como medidor de las subidas o bajadas del nivel, indicándonos cuando son las épocas de sequía o de plenitud de lluvias con sus reservas de agua; Plampalacios, Arasanz, Morillo de Tou o incluso Gerbe, fueron otros de los núcleos habitados que también se vieron afectados por el embalse.
Los llamados “Puentes del Diablo”, todos tienen su pequeña historia, y que poco más o menos son coincidentes entre sí, siempre se hace referencia, con distintas variantes aunque el fondo es muy parecido, a que el diablo se ofreció para construir el puente en una noche y antes de que cantara el gallo, pero a cambio de llevarse a alguna doncella, lo cual no llegaba a realizar porque siempre faltaba colocar la última piedra, por alguna u otra razón.
Tres fotos que pueden servir para ubicarnos un poco. El Tozal de Monclús, llamado también “La Pirámide”, en cuya cima existen todavía restos de una antigua fortificación o castillo, nos recuerda el desagradable acontecimiento acaecido a principios de julio de 1320, en el desaparecido pueblo de Monclús, y en el que se efectuaron todo tipo de tropelías y desmanes contra la población judía de la época por parte de “Los Pastorells”, los cuales eran un ‘ejército’ de pastores que provenían del sur de Francia, que no tenían ni guía ni caudillo, y que habían cruzado los Pirineos a la llamada de una cruzada por parte del infante Alfonso, hijo de Jaime II, contra los moros del reino de Granada pues estos amenazaban con invadir el reino de Valencia; “Los Pastorells”, saquearon todo tipo de bienes de laicos y clérigos, asesinaron judíos, arrasaron morerías y se enfrentaron a las autoridades sembrando el pánico.
Las fotos que vienen a continuación, corresponden a épocas distintas, una en la que el embalse está pleno de agua y solo asoma el campanario de la torre de la iglesia, y la otra de sequía, con el pantano vacío, en la que se puede ver la torre completa así como el Esconjuradero que se halla a su lado (sobre este tipo de construcciones, los esconjuraderos, haremos alguna reseña algún otro día).
Fotos del inicio de la ruta:
El Congosto del Entremón, es un impresionante desfiladero tallado en la roca, que une los pantanos de Mediano y El Grado, con unas paredes casi verticales que pueden llegar a superar los 400 metros. Su recorrido es una bonita ruta ornitológica, ideal para la observación de aves y disfrutar de una exuberante vegetación de tipo mediterráneo.
Este desfiladero, aparte de servir de paso entre lo que hoy son las Comarcas del Somontano y de Sobrarbe, también fue un peligroso recorrido para el descenso de aquellas navatas que, durante muchos años, transportaron troncos de madera desde el Pirineo hasta las tierras más bajas, e incluso llegaron a zonas del bajo Ebro, como Tortosa.
El pueblo de Ligüerre de Cinca, que fue abandonado durante la década de los sesenta por la construcción del embalse de El Grado, ha sido recuperado por un sindicato como recinto vacacional, habiendo hecho un buen trabajo de restauración y conservación.